CUESTIONES DE ¿ESTILO? SEGUNDO Y ÚLTIMO CAPÍTULO
Por razones que no vienen al tema, el señor al que me refería en mi último artículo asistió como invitado, en la sección A Revista, al programa en el que colaboro como especialista en Protocolo social. Carlos F. Amado, director y presentador del programa y Xesús Peleteiro, copresentador y guionista de la sección en la que participo, dirigieron el encuentro.
Seguí con curiosidad el desarrollo de la misma. Tenía interés en saber cómo abordaban todo el reportaje mis compañeros sabiendo a quién tenían delante. La presentación que ofrecieron del caballero en cuestión fue “comentarista de sociedad”, muy apropiada.
Una de las mayores perlas que ofreció gratuitamente fue atentar contra la “utilidad lingüística” del gallego: “hay que ser un poquito más internacional”, dictaminó. Corriendo sangre gallega por sus venas, en un programa de la televisión gallega, cobrando dinero gallego y, un fiel y agradecido público gallego escuchando sus … me parece muy poco acertada y respetuosa su sentencia.
Carlos y Xesús se encontraron con una persona muy sobrada que se permitió el lujo de distinguir entre “morralla” y “no morralla”, como suena, a las personas que conforman el panorama social de nuestro país. Definiendo quién integra un grupo u otro en función de “quién no tiene interés y quién lo tiene”, poniendo como ejemplo del primero a Genoveva Casanova y del segundo a Isabel Preysler, “entre otras cosas, por los hombres con los que se ha casado”. Impresionante currículum…
Sondeado sobre su participación en un programa de una televisión autonómica, únicamente sentenció: “me sorprende que haya gente con tanta falta de pudor, descarada y aburrida en el mundo”. Curiosa concepción de las personas que siguen sus consejos.
A la pregunta que le formuló Xesús sobre su opinión respecto a los papeles curiosos (elegante sinónimo de bufones) que en ocasiones le tocaba representar en sus distintas apariciones televisivas, aseguró sentirse encantado “ya que propicia una presencia constante en los zapping y una popularidad que se traduce en dinero en forma de contratos y publicidad”… Por cierto, le regaló un: “tienes una vida muy cortita” cuando mi colega afirmó utilizar en muy pocas ocasiones la corbata.
Me reservo la opinión que mis compañeros tienen del hombre en cuestión y de la calificación que asignaron al encuentro. Me siento orgullosa de colaborar en un programa en el que el respeto, la educación, la elegancia y el sentido del humor priman sobre cualquier otro factor con independencia del comportamiento que manifiesten los invitados entrevistados. Sólo puedo repetir el sentimiento que me embargó manifestado en las palabras que les envié tras el tenso momento vivido: Sodes fantásticos.
No manifiesto ninguna aversión personal hacia usted. Llevo años luchando por el reconocimiento de mi especialidad, defendiendo la necesidad del conocimiento y puesta en práctica de la misma. Reclamo, por respeto a todas las personas que demandan nuestro asesoramiento, recomendaciones asentadas en una base científica desde una perspectiva, moderna, innovadora y adecuada a la realidad social que nos rodea.
Definitivamente señor Rodríguez, su estilo y el mío (gallego y honrado) siguen caminos muy diferentes.