¿SE DEBE DECIR «BUEN PROVECHO»?
“Qué aproveche”, “Buen provecho”, “Provecho” o “Buen apetito” son expresiones utilizadas en nuestro entorno social próximo muy habitual en muchas culturas y tradiciones. Durante mucho tiempo no eran aceptadas pero la actualización a los tiempos y a las personas así como su difundida utilización como muestra de amabilidad, provocaron su admisión en aquellas situaciones en las que los presentes mantengan una relación estrecha.