¿SE PUEDEN CAMBIAR LOS REGALOS QUE SE RECIBEN?
Antiguamente, no se defendía cambiar un regalo a no ser que fuese una prenda de vestir con una talla inadecuada o que ya poseyéramos un presente igual o de similar características.
Hoy en día, estas premisas no son útiles ni prácticas. En la mayoría de los casos, el obsequio incluye un ticket regalo que te permite acudir al establecimiento donde fue adquirido y permutarlo por otro regalo que te ilusione o se adapte más a tus gustos o necesidades. Libremente, haz uso de él.
Si el emisor del presente te informa de dónde ha sido adquirido y que puedes cambiarlo sin necesidad de presentar un recibo, lo que ocurre en cada vez menos sitios, no dudes en seguir sus indicaciones.
En el caso de que no tengas posibilidad de sustituirlo por otro, dónalo a una entidad o asociación benéfica. Sin duda, tendrán una larga lista de beneficiarios que sabrán sacarle partido y seguramente, más de una impagable sonrisa.